Ep.50 Emprender, Invertir, Aprender
Cómo crear una startup
Hay invitados que traen datos, otros que traen inspiración. Adrián Gallardo trae cicatrices. Las buenas. Las que marcan porque han dolido. Las que te enseñan cómo es emprender de verdad. Este episodio es una masterclass brutal sobre lo que significa construir, caer y volver a levantarte en el ecosistema emprendedor español.
Arrancó en Deloitte, lo dejó todo para dar la vuelta al mundo, montó una empresa de importaciones desde México, y acabó creando un SaaS con modelo marketplace para grandes marcas. En el camino, se le cayó el pelo por completo tras un conflicto legal con un cofundador, invirtió en más de 20 startups y ahora dirige operaciones en AticcoLab, una de las aceleradoras más activas de España.
Empezar sin plan, solo con hambre
Adrián no soñaba con emprender desde niño. Lo suyo fue más visceral: dejar una big four, perderse por Asia y acabar lanzando Trendy en México, una agencia de productos promocionales que trabajaba con Uber, Visa o Unilever. En dos años, 20 empleados, decenas de marcas y una tensión de caja digna de máster.
De ahí el primer gran aprendizaje: da igual lo que estudiaste, lo que importa es lo que resuelves.
Y también: no hay que enamorarse de un modelo. Cuando replicaron el negocio en España, se dieron cuenta de que el mercado era demasiado pequeño. En lugar de empeñarse, pivotaron.
Lo que nadie te cuenta de emprender
Tras la etapa en México, lanzó Subo, una especie de Wallapop 100% digitalizado. Todo iba bien, hasta que dejó de ir. Un CTO que tira del cable. Código perdido. Juicio. Presión. Silencio. Y el cuerpo que dice basta.
“Perdí todo el pelo en cuatro días. Me fui solo a Canarias a caminar y pensar.”
¿El mayor aprendizaje? Que no importa lo que te pase, sino cómo lo gestionas. Y que tener un pacto de socios es obligatorio, pero no suficiente. Porque en España, si la cosa va a juicio, puede alargarse más de un año.
De emprendedor a inversor (pero sin humo)
Hoy, Adrián ha invertido en más de 20 startups, es LP del fondo de Aticco y acompaña a decenas de emprendedores cada año.
Lo deja claro: invertir en startups no es invertir en bolsa. Es ilíquido, arriesgado y muchas veces, puramente relacional. Solo hay tres salidas reales: venta secundaria en ronda, adquisición o salida a bolsa. Y la tercera casi no existe en España.
“Solo tiene sentido invertir si estás dentro del ecosistema. Si no, es como comprar un boleto de lotería.”
IA, bootstrapping y el futuro de los equipos de dos personas
Como mentor y operador, Adrián es power user de la IA. Se crea sus propios GPTs para hacer seguimiento de startups, recordar métricas, generar actas y priorizar tareas. Dice que el 80% del trabajo ya lo hacen bien.
Y eso le lleva a otra reflexión potente: vamos a ver empresas de dos personas que facturan millones. Porque con IA y automatización, muchos proyectos pueden ser sostenibles sin levantar rondas.
Eso sí, aclara: no todo lo que genera dinero es invertible. Un proyecto puede ser un gran negocio sin ser una startup de crecimiento.
¿Es España un buen lugar para emprender?
Depende de con qué lo compares. Con Silicon Valley, no. Pero Adrián es optimista. Ve cómo Madrid, Barcelona, Valencia y Málaga están madurando. Cómo los Business Angels aparecen. Cómo los primeros exits alimentan el ciclo.
Aunque también dispara:
“Gastamos más en regular que en innovar. Y eso es un problema.”
Para él, el futuro del ecosistema pasa por dejar de copiar lo que hace EE.UU. y apostar de verdad por la innovación local. Por eso está donde está: en AticcoLab, ayudando a que en lugar de que mueran 9 de cada 10 startups, mueran solo 7.
Enlaces mencionados
Trendy → Brand Factory
Universidad Leinn– formación emprendedora
Lucía IA – caso que menciona en el podcast
¿Estás empezando tu proyecto?
En Nomu Labs ayudamos a startups a validar su propuesta, escalarla y hacerla crecer sin humo. Desde gamificación hasta internacionalización, estamos donde los emprendedores necesitan visión clara y ejecución real.